Diversos sectores se han pronunciado a favor y en contra de la medida de la Dirección General de Aduanas (DGA) de gravar las compras por internet cuyo costo inferior a los 200 dólares.
Mientras que algunos afirman que la decisión de Aduanas sería inconstitucional, en cambio otros consideran que las compras por internet constituyen una competencia desleal contra el comercio formal y que además crea desempleos.
Este viernes, el senador Tommy Galán y el diputado Ramón Cabrera, pidieron por separado al director de Aduanas, ingeniero Fernando Fernández, dejar sin efecto la disposición de gravar las compras por Internet por valores iguales o inferiores a los 200 dólares, porque sería inconstitucional.
Indican que resulta inexplicable que el director de Aduanas, ingeniero Fernández, pretende crear un impuesto por vía administrativa.
Recordaron que el presidente Danilo Medina dejó sin efecto el cobro de impuestos a compras por Internet por el rechazo de la población a gravar esas compras. Señalaron que sólo el Congreso Nacional está facultado para establecer impuestos y que quien desobedezca esa disposición, actúa al margen de la ley.
En tanto, el director de Aduanas, Fernando Fernández, dijo que es irreversible el impuesto a las compras por internet menores a 200 dólares, porque representará para el Estado pérdidas por 5 mil 600 millones de pesos.
Ayer, el vicepresidente de la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus), doctor Servio Tulio Castaños Guzmán y el presidente del Senado, doctor Reinaldo Pared Pérez, rechazaron por separado el anuncio de Aduanas de gravar todas las compras por Internet.
En dirección contraria se expresó el senador por Azua, Rafael Calderón, quien dijo que las compras por internet constituyen una competencia desleal contra el comercio formal.
En iguales términos se manifestaron los dirigentes sindicales Rafael (Pepe) Abreu y Elogia Familia quienes respaldaron la medida, por considerar que ese tipo de transacción comercial constituye una competencia desleal a la industria y el comercio y provocaría pérdidas de empleos.
Abreu y Familia, presidente y vicepresidenta de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS) respectivamente, afirmaron que esos negocios no benefician a la clase pobre, sino a una reducida capa de la sociedad que dispone de tarjetas de crédito en dólares y maneja la tecnología del Internet.
De su lado, el empresario José Luis Corripio Estrada consideró ayer que se debe buscar un equilibrio entre “lo racional, lo correcto y lo que sea económicamente viable”, en la discusión planteada por la justificación o no del cobro de impuestos a las compras por Internet menores de 200 dólares.
Por Ramón Ramos.
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